En un acto conmemorativo en Lozoyuela, Madrid, se resaltaron los sacrificios de los presos republicanos durante la dictadura franquista, quienes construyeron la línea ferroviaria Madrid-Burgos. La declaración de «lugares de memoria democrática» permitirá preservar estos sitios y educar a nuevas generaciones sobre el pasado. En el evento participaron autoridades, estudiantes y familiares de represaliados, quienes compartieron relatos personales y emotivos de las difíciles condiciones vividas. La ley de memoria democrática busca identificar obras y empresas beneficiadas por el trabajo forzado, promoviendo iniciativas de reparación. Se destaca la importancia de enseñar sobre derechos humanos para evitar repetir errores del pasado.
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