El fiscal general ha sido inhabilitado durante dos años tras una investigación que reveló comunicaciones comprometedoras y acciones de encubrimiento. Los elementos clave del caso incluyen seis mensajes, dos llamadas, un correo electrónico, una nota y un intento de triple borrado de información, que colectivamente demostraron un comportamiento inapropiado e influenciaron la decisión final de la justicia. Estos hallazgos subrayan la gravedad de las acciones y la determinación de mantener la integridad del sistema judicial.
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