En la localidad onubense de Lepe se está llevando a cabo un notable esfuerzo por la inclusión social, especialmente dirigido a los residentes en asentamientos. Este esfuerzo ha resultado en una significativa reducción de su número: de los 14 asentamientos existentes en 2021, ahora solo quedan nueve, con 167 personas habitando en ellos. Destacadamente, el 43% de estas personas tiene su situación legal regularizada.
La provincia de Huelva, reconocida por su liderazgo en la producción de fresas, atrae a trabajadores de diversas partes del mundo para labores agrícolas, lo que ha ocasionado un incremento en la diversidad sociodemográfica de Lepe. Desde 1981, la población ha crecido de 13.600 a más de 31.000 personas en 2024, con una notable presencia de inmigrantes nacidos en 57 países diferentes.
Los primeros asentamientos en Lepe surgieron en 1999 y a lo largo de los años llegaron a proliferar. Esta situación impulsó al municipio a implementar un plan pionero para erradicar el chabolismo, con el consenso de todos los grupos políticos. Sin embargo, fue en 2020, con el Plan Easen impulsado por la Consejería de Inclusión Social, cuando se tomaron acciones más decisivas para afrontar este problema, extendido también a otras localidades de Huelva y Almería.
Una de las estrategias del Plan Easen es la creación de censos detallados sobre los habitantes de los asentamientos para abordar las dificultades específicas de cada lugar. Hasta ahora, el trabajo del Ayuntamiento de Lepe, que comenzó con un sondeo en 2021, ha conseguido reducir drásticamente el número de habitantes de los asentamientos, de 625 a 167 personas.
Entre los asentamientos más conocidos, como Cobella y Prado, se han evidenciado reducciones sustanciales en la cantidad de chabolas y residentes. Mientras que en Cobella se pasó de 79 a 41 habitantes, en Prado la disminución fue aún más acentuada, de 64 a 19 chabolas y de 64 a 19 habitantes. Estas disminuciones se replican en otros asentamientos, corroborando un descenso generalizado en el número de chabolas de 409 en 2021 a 118 actualmente, y de personas de 625 a 167.
Pese a este avance, son varios los retos por enfrentar. De las 167 personas que permanecen en los asentamientos, 72 cuentan con permisos de residencia y trabajo. La presencia femenina en estos asentamientos es mínima, representando solo el 10% de los habitantes.
El progreso logrado ha sido gracias al esfuerzo del equipo del Ayuntamiento de Lepe, liderado por José Manuel Méndez y Mustapha El Kaddouri, junto con un variado grupo de profesionales que trabajan incansablemente para seguir mejorando la situación de los residentes en los asentamientos. La labor continúa, con la esperanza de seguir ofreciendo alternativas habitacionales para todos ellos.
Fuente: Junta de Andalucía.