La multinacional alemana Lidl, reconocida mundialmente por su presencia en el sector de la alimentación, ha sorprendido al mercado con su incursión en el ámbito de la computación en la nube. A través de su reciente división tecnológica, Schwarz Digits, creada en 2023, Lidl ha logrado captar la atención de empresas prestigiosas como SAP, el Bayern de Múnich y el puerto de Hamburgo, consolidándose como un nuevo competidor en un mercado tradicionalmente dominado por gigantes como AWS, Google Cloud y Microsoft Azure.
Lo que comenzó como una simple iniciativa para satisfacer demandas internas del Grupo Schwarz, al que pertenecen Lidl y Kaufland, ha crecido rápidamente hasta convertirse en un negocio de gran relevancia. Según Christian Müller, co-CEO de la división, el objetivo inicial no era comercial, sino encontrar soluciones para las necesidades de la propia empresa. En solo un año, Schwarz Digits ha alcanzado una plantilla de 7.500 empleados y una facturación anual de 1.900 millones de euros, mostrando un crecimiento notable en el competitivo sector tecnológico.
Uno de los elementos más atractivos y diferenciadores de Schwarz Digits es su enfoque en la privacidad y la soberanía de los datos, un aspecto crucial para las empresas preocupadas por la seguridad de su información. Todos los datos se almacenan exclusivamente en centros localizados en Alemania y Austria, países con estrictas normativas de protección de datos. Este enfoque no solo garantiza un alto nivel de seguridad para datos internos del grupo como patrones de venta y detalles de empleados, sino que también ofrece una atractiva alternativa a empresas alemanas que buscan evitar la dependencia de proveedores estadounidenses.
Además, el Grupo Schwarz ha expandido sus ambiciones más allá de la nube, incluyendo la ciberseguridad y la inteligencia artificial entre sus proyectos futuros. La adquisición de la empresa israelí XM Cyber por 700 millones de euros en 2021 y la reciente inversión en la startup de IA Aleph Alpha destacan su interés en desarrollar capacidades europeas dentro de estos campos.
El desarrollo de estas áreas no se realiza sin un cuidado extremo en la gestión de seguridad. Schwarz Digits mantiene un perfil bajo y exige acuerdos de confidencialidad a sus empleados para proteger la ubicación de sus oficinas principales, una estrategia que refleja su compromiso con la seguridad de los datos.
Con su enfoque en la privacidad y la localización, Schwarz Digits se ha posicionado como una alternativa atractiva a los tradicionales líderes del mercado, ganándose clientes como el Bayern de Múnich, que priorizan la soberanía digital. El ingreso de Lidl en la nube marca una transformación trascendental, indicando que incluso empresas centradas en el comercio minorista y la alimentación pueden convertirse en protagonistas dentro del sector tecnológico. A medida que la privacidad y la soberanía de los datos cobran más importancia en Europa, la llegada de jugadores como Schwarz Digits podría redefinir el equilibrio de poder en el mercado de servicios en la nube.
