El 21 de septiembre se realizó un emotivo homenaje en Arizona para honrar al activista conservador Charlie Kirk, asesinado el 10 de septiembre. El evento, que congregó a decenas de miles de personas en el State Farm Stadium, fue encabezado por Donald Trump, quien lo calificó de mártir de la libertad estadounidense. Trump, presente junto con figuras como Elon Musk, destacó la valentía de Kirk y denunció al atacante como un «monstruo radicalizado». La viuda de Kirk compartió su dolor ante la multitud, mientras los asistentes gritaron «¡USA, USA!» mostrando su apoyo. Líderes del movimiento conservador, como Tulsi Gabbard, Marco Rubio y Pete Hegseth, también estuvieron presentes, subrayando el clima de fervor patriótico. Este trágico suceso ha avivado las preocupaciones sobre la violencia política en el país.
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