El Gobierno se prepara para la tercera prórroga de un presupuesto elaborado en la anterior legislatura por un Ejecutivo diferente y aprobado por un Parlamento distinto al actual. Esta situación refleja los desafíos políticos y administrativos de mantener un marco presupuestario que no ha sido adaptado a las necesidades actuales del país. La continuidad de estas cuentas subraya la dificultad para alcanzar consensos políticos en el contexto actual.
Leer noticia completa en El Mundo.