El Tribunal de Distrito de Varsovia ha programado para el 25 de febrero de 2026 la comparecencia de Pablo González, también conocido como Pavel Rubtsov, acusado de espionaje para la inteligencia militar rusa. El juez Paweł du Château ha determinado que, si González no se presenta, se podría emitir una orden de búsqueda internacional. Tras ser arrestado en 2022 cerca de la frontera ucraniana mientras trabajaba como periodista, González pasó dos años y cinco meses en prisión en Polonia, hasta que fue liberado en un intercambio de detenidos impulsado por la administración Biden. A pesar de las acusaciones, González mantiene su inocencia, afirmando ser víctima de un complot por sus actividades periodísticas. Aunque su defensor ha adelantado su no comparecencia, la ley polaca exige que sea juzgado en presencia para declararse sobre los cargos, lo cual abre la posibilidad de una orden de arresto si no se presenta. El juicio, en medio del misterio por involucrar asuntos de inteligencia, se reanudó tras una suspensión y las autoridades continúan su persecución, a pesar de las pasadas medidas diplomáticas para su liberación.
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