En la conferencia SC25 celebrada en St. Louis, NVIDIA ha revelado cómo la computación acelerada y la inteligencia artificial están transformando la investigación y el desarrollo de nuevos materiales. Estas innovaciones prometen revolucionar industrias mediante el diseño avanzado de materiales para centros de datos, pantallas OLED y baterías, entre otros.
Un reto común en estas iniciativas es la vastedad del espacio molecular, que complica su exploración por métodos tradicionales. La respuesta se encuentra en la sinergia entre sensores avanzados, inteligencia artificial en el edge y microservicios especializados en química y ciencia de materiales.
Una de las grandes sorpresas de la conferencia fue Holoscan, la plataforma de IA desarrollada por NVIDIA para el procesamiento de datos en tiempo real. En el Brookhaven National Laboratory, Holoscan está permitiendo a los investigadores procesar volúmenes masivos de datos generados por el National Synchrotron Light Source II casi instantáneamente. Gracias a esta tecnología, los investigadores ahora pueden ajustar y optimizar sus experimentos al momento, maximizando el uso de este costoso recurso científico y abriendo el camino hacia experimentos más autónomos.
Por su parte, NVIDIA ha introducido ALCHEMI, un conjunto de microservicios diseñados para la química y la ciencia de materiales. ALCHEMI se integra en la plataforma NVIDIA NIM, permitiendo a científicos y empresas llevar a cabo simulaciones moleculares a gran escala. ENEOS, una de las compañías usuarias, ha adoptado esta tecnología para desarrollar líquidos refrigerantes y catalizadores más eficientes, cruciales para la transición energética.
Universal Display Corporation (UDC) también se ha sumado a la revolución. Con el apoyo de ALCHEMI, UDC está acelerando el descubrimiento de materiales OLED. La IA permite analizar miles de millones de candidatos moleculares hasta 10,000 veces más rápido que con técnicas tradicionales, facilitando el desarrollo de OLED más eficientes y sostenibles.
El impacto de estas tecnologías va más allá de casos aislados. Con más de 150 bibliotecas y frameworks CUDA-X de NVIDIA, una vasta gama de problemas científicos e ingenieriles está encontrando soluciones más rápidas y eficientes. Estas innovaciones prometen centros de datos más eficientes, dispositivos electrónicos más sustentables, y ciclos de innovación más cortos.
En definitiva, lo exhibido en SC25 no es solamente una muestra de la potencia de las GPU, sino un vistazo al futuro donde la IA y la computación acelerada son esenciales para el desarrollo científico del siglo XXI. Estas herramientas no solo ayudan a descubrir nuevos materiales, sino que también facilitan productos más sostenibles y eficientes para los consumidores.








