NVIDIA ha lanzado al mercado la nueva RTX PRO 5000 con 72 GB de memoria GDDR7, una inclusión estratégica en el mundo de la tecnología que llega para responder a las crecientes demandas de los flujos de trabajo impulsados por inteligencia artificial (IA) generativa y agéntica. Este lanzamiento busca resolver las limitaciones de memoria que enfrentan las GPUs de escritorio, una necesidad exacerbada en momentos en que las empresas prefieren ejecutar procesos de manera local para mejorar la privacidad, reducir latencias y minimizar costos.
La última edición de la RTX PRO 5000 incrementa su capacidad de memoria en un 50% comparado con su predecesora de 48 GB, posicionándose como una herramienta esencial para desarrolladores, ingenieros y creativos que requieren más memoria sin necesitar un entorno de centro de datos. Es un paso significativo para aquellos que ahora no solo se enfocan en renderizar o simular, sino también ejecutan modelos de lenguaje y pipelines multimodales complejos.
Para entender la relevancia de estos 72 GB, resulta clave observar el impacto en dos aspectos: la capacidad y el throughput. La capacidad determina qué modelos y activos pueden almacenarse simultáneamente en la GPU, mientras que el throughput mide la velocidad al generar texto o imágenes. Esta mejora busca aliviar las limitaciones de memoria, facilitando la ejecución de modelos de lenguaje extensos, contextos ampliados, y pipelines que integran texto, imagen, y herramientas de recuperación de información.
El modelo se soporta en la arquitectura NVIDIA Blackwell, que promete mejoras en rendimiento para IA, renderizado neuronal y la gestión de múltiples cargas de trabajo eficientemente. Ofrece 2.142 TOPS de rendimiento para IA, posicionando la RTX PRO 5000 72 GB como una GPU capaz de asumir tareas que antes se reservaban para infraestructuras más robustas, como entrenamientos ligeros o prototipado de agentes, todo dentro de un entorno local.
Este enfoque no solamente es un gran avance a nivel técnico, sino también aporta ventajas en términos de privacidad y control de datos. Ejecutar procesos en local minimiza las dependencias externas y protege datasets sensibles, reduciendo los costos asociados a la ejecución en la nube.
En pruebas comparativas, la nueva GPU muestra un rendimiento significativamente mejorado frente a sus predecesores: hasta 3,5 veces más en generación de imagen y el doble en generación de texto. Además, ofrece mejoras sustanciales en aplicaciones de visualización profesional y motores de render como Arnold, Chaos V-Ray, y Blender, logrando incrementos de hasta 4,7 veces en eficiencia.
Con la implementación de la RTX PRO 5000 72 GB, NVIDIA se enfoca en un mercado profesional híbrido que necesita mezclar CAD/CAE, simulación, y herramientas generativas. La memoria adicional que ofrece esta GPU permite manejar escenas 3D y tareas complejas con menos interrupciones.
Los primeros casos de adopción destacan por su enfoque en diseño generativo e iteración en producción virtual, áreas que se benefician enormemente de la capacidad extra de la GPU. Empresas como InfinitForm y Versatile Media ya están aprovechando estas ventajas para optimizar sus flujos de trabajo y enfrentarse a retos creativos y de ingeniería.
Actualmente, la RTX PRO 5000 72 GB está disponible a través de partners como Ingram Micro, Leadtek, y xFusion, con una expansión prevista a integradores globales a comienzos del próximo año. Este lanzamiento no solo subraya la dirección hacia la cual se dirige el procesamiento de IA en entornos laborales, sino también enfatiza la importancia creciente de favorecer la capacidad y velocidad de procesos cercanos al usuario, sin depender constantemente de recursos en la nube.








