En Londres, más de 425 personas fueron detenidas por apoyar al grupo proscrito Palestine Action durante una protesta que derivó en altercados violentos. La policía había advertido previamente que manifestarse a favor de organizaciones prohibidas es un delito según la Ley de Terrorismo. Según Claire Smart de Scotland Yard, se realizaron 25 arrestos por agresiones. Otra manifestación simultánea con 20,000 participantes transcurrió pacíficamente sin apenas detenciones. La policía ya había detenido a más de 500 personas en agosto por el mismo motivo, tras la prohibición del grupo en julio. Hasta ahora, 138 personas enfrentan cargos con penas de hasta 14 años de cárcel.
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