El Sant Jordi aguantó con valentía durante 34 minutos ante un Osasuna decidido, pero un penalti abrió el marcador en favor de los navarros. Raúl García, parte de un equipo titular fuerte que incluía a jugadores como Herrando y Kike Barja, amplió la ventaja antes del descanso. La segunda mitad vio a García completar un hat-trick, seguido de goles de Budimir y Barja, sellando un 0-5 final. A pesar del resultado, el partido fue un hito para el Sant Jordi, que jugó lejos de su estadio habitual por requisitos federativos.
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