El padre de acogida del bebé de 22 meses fallecido en Linares ha pedido perdón y comprensión a la familia biológica del niño, calificando el suceso como un «terrible accidente». A pesar de ser liberado tras su declaración, sigue investigado por un posible homicidio imprudente. En un comunicado, expresó su dolor, resaltando el amor que el menor recibió durante su tiempo en su hogar y agradeciendo el apoyo de varias instituciones. Con experiencia de ocho años en acogida, el hombre enfatizó el compromiso y vigilancia de las autoridades en estos casos. Además, hizo un llamado a otras familias para que continúen confiando en el proceso de acogimiento, destacando su valor y humanidad.
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