La Dirección General de Consumo de la Junta de Andalucía ha resaltado una serie de hábitos sostenibles en el marco del Día Internacional de la Concienciación sobre la Pérdida y el Desperdicio de Alimentos. El objetivo es disminuir el enorme volumen de alimentos que acaba en la basura, una problemática reflejada en los 60 millones de toneladas de alimentos desperdiciados anualmente en la Unión Europea, donde más de la mitad proviene de hogares.
La planificación del menú semanal, la revisión de la despensa y hacer la compra con una lista ajustada son acciones clave para reducir el despilfarro. Elegir productos a granel, reducir envases innecesarios y prestar atención al etiquetado también son medidas recomendadas.
El almacenamiento adecuado prolonga la vida útil de los alimentos. La organización del frigorífico y el uso de envases herméticos son prácticas efectivas. Además, preparar raciones ajustadas previene que se generen sobras.
Los restaurantes también juegan un papel importante. Permitir que los clientes se lleven la comida sobrante en recipientes reutilizables y debidamente higienizados es una práctica sostenible que debe ser promovida.
Fuente: Junta de Andalucía.








