El Real Madrid vivió otra noche complicada en el Santiago Bernabéu al caer frente al Celta en un partido que ejemplificó el caos vigente en el conjunto blanco. A pesar de intentar una presión alta, el equipo de Xabi Alonso mostró falta de pericia y voluntad, especialmente en sus estrellas como Mbappé y Vinicius, lo que permitió al Celta aprovechar los espacios y anotar con un gol memorable de Williot. Las lesiones de Militao y Fran García complicaron aún más la situación y, tras una expulsión, el Madrid enfrentó el desafío con un hombre menos. Aunque hubo destellos de esfuerzo y ocasiones claras con las gradas encendidas, la falta de consistencia y claridad táctica fueron evidentes. La derrota deja al equipo más rezagado en la liga, en un momento en que se pide un cambio de rumbo y quizá más presencia del joven Endrick. Con el City como próximo rival, la incertidumbre acecha sobre el futuro inmediato del club.
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