En un alarmante incidente que subraya la gravedad de la guerra en Ucrania, dos ciudadanos ucranianos con vínculos con la inteligencia rusa han sido identificados como responsables de actos de sabotaje en la vía férrea crítica para el suministro de ayuda a Ucrania desde Polonia. Según el primer ministro polaco, Donald Tusk, estos actos, ocurridos tras la infiltración de los saboteadores desde Bielorrusia, incluyeron intentos de descarrilamiento con abrazaderas de acero y la detonación de explosivos militares, aunque ambos fracasaron en causar mayores daños. Tusk subrayó la amenaza que representan tales acciones no solo por el riesgo directo, sino también por su potencial para sembrar caos y desconfianza en Polonia, país que alberga a un millón de refugiados ucranianos. En respuesta, las autoridades han elevado el nivel de alerta ferroviaria y están en estrecha colaboración con la inteligencia aliada para identificar y capturar a los responsables de lo que describen como un hecho sin precedentes desde el inicio del conflicto.
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