Julia Wendell, quien previamente atrajo atención mediática al afirmar ser Madeleine McCann, ha reabierto el caso tras revelar resultados de ADN que sugieren un vínculo genético con Gerry McCann, padre de la menor desaparecida en 2007. Wendell, de 23 años, compartió que una comparación genética muestra un 69,23% de coincidencias con Gerry McCann, lo que refuerza la hipótesis de una relación filial pese a la discrepancia en la edad, ya que Madeleine tendría actualmente 21 años. Estas revelaciones, apoyadas por expertos en genética, han generado nuevas especulaciones en el caso nunca resuelto de la desaparición de Madeleine, manteniendo viva la controversia que ha rodeado al caso desde sus inicios.
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