El Govern del Partido Popular de Baleares, liderado por Marga Prohens, evita el enfrentamiento con los docentes, recordando el impacto negativo que la protesta de 2013 tuvo en sus resultados electorales. La política educativa se maneja con precaución, evitando tocar la autonomía de los centros. Aunque Prohens ha suscrito acuerdos con Vox para la vehicularidad del español y el catalán, las propuestas de este último, que implican restricciones, no prosperarán en el Parlament. La autonomía de los colegios ha limitado la elección del español como lengua principal, causando descontento en Vox, que acusa al Govern de conservador. Mientras Prohens navega entre presiones políticas, evita repetir los errores del pasado, especialmente el conflicto con los docentes catalanistas, representados simbólicamente por las «camisetas verdes».
Leer noticia completa en OK Diario.