La conversación sobre la adopción de Proxmox en los centros de datos ha evolucionado de manera significativa en los últimos años. Lo que en un principio era una discusión limitada a laboratorios y pequeñas empresas se ha transformado en una alternativa seria para organizaciones que requieren virtualización confiable y costos eficientes. En 2025, Proxmox Virtual Environment (Proxmox VE) celebra su vigésimo aniversario con cifras impresionantes: más de 1,5 millones de hosts desplegados globalmente, una comunidad de más de 200.000 miembros, presencia en 142 países y más de 1.000 revendedores e integradores. Estas estadísticas subrayan cómo Proxmox ha dejado de ser una opción de «nicho» para convertirse en una decisión estratégica de infraestructura.
El atractivo de Proxmox VE se centra en su capacidad para unificar máquinas virtuales, contenedores, clustering, alta disponibilidad y almacenamiento en una sola plataforma. Esto simplifica las operaciones al reducir la necesidad de múltiples componentes externos y productos adicionales. Su enfoque «todo en uno» resulta convincente a la hora de justificar decisiones empresariales, especialmente cuando se busca mantener un entorno virtualizado robusto sin aumentar la carga operativa.
Un gran catalizador en la adopción de Proxmox ha sido la situación con VMware tras su adquisición por Broadcom. La incertidumbre comercial y la reestructuración de portfolios han hecho que muchas organizaciones se replanteen sus estrategias de virtualización. Frente a esto, Proxmox ofrece una alternativa con un mensaje claro: software de código abierto, sin las ataduras de un esquema de licenciamiento tradicional, y con soporte comercial como servicio.
En 2025, Proxmox VE sigue evolucionando con mejoras centradas en operaciones críticas, como en su versión 8.4, que incluye avances en la capacidad de migración en caliente. Esto es vital para plataformas en producción donde el tiempo de inactividad no es una opción.
El interés por Proxmox también se refleja en su creciente «mindshare», una medida de visibilidad entre profesionales que evalúan herramientas de virtualización. Plataformas de comparación como PeerSpot destacan a Proxmox como una opción significativa en el segmento de virtualización de servidores, posicionándose cada vez más en los procesos de selección y pruebas piloto.
Para los administradores de sistemas, adoptar Proxmox implica más que mover máquinas virtuales. Requiere reconsiderar la arquitectura de almacenamiento, la red y segmentación, las estrategias de backups y recuperación ante desastres, la automatización y el modelo operativo. La promesa de Proxmox no radica únicamente en su costo, sino en la posibilidad de construir una plataforma moderna con más control técnico y menos dependencia comercial.
Las preguntas frecuentes aclaran dudas comunes: aunque la migración de VMware a Proxmox puede ser compleja, es posible planificarla para minimizar interrupciones. Además, Proxmox es perfectamente viable para empresas, siempre que se implemente con una mentalidad orientada a la producción. La elección entre ZFS o Ceph para almacenamiento depende del caso de uso específico, y las organizaciones consideran a Proxmox como reemplazo de VMware debido a su previsibilidad en costos y control, así como a su madurez técnica.
En resumen, Proxmox se ha consolidado como una opción viable y atractiva para la virtualización en 2025, ofreciendo una plataforma de código abierto con características robustas que responden a las necesidades modernas de los centros de datos.








