Qatar organiza una cumbre de países árabes e islámicos en Doha, con la presencia de líderes como el presidente turco Recep Tayib Erdogan, para responder al reciente ataque israelí que buscó atacar a la dirigencia de Hamás en el exilio. El primer ministro qatarí, Mohammed bin Abdulrahman al Zani, denunció este acto como «terrorismo de Estado» y criticó la agresión mientras se intentaba negociar un alto el fuego. La reunión también condena los ataques continuos de Israel, aunque no se espera una respuesta militar ni medidas diplomáticas concretas. El presidente Trump ha advertido a Israel sobre ser cauteloso y ha destacado la alianza con Qatar. La situación ha generado tensiones en el mundo árabe y críticas a la administración de Netanyahu.
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