El reciente temporal de lluvias ha dejado huella en la red de carreteras de la Diputación de Cádiz, pero gracias a los esfuerzos incansables del personal del Servicio de Vías y Obras, la circulación se ha restablecido en casi toda la provincia. Este trabajo se enmarca dentro del área de Cooperación, que dirige Javier Bello, y ha permitido que muchas de las vías afectadas por el clima extremo vuelvan a estar operativas.
Durante los días pasados, las intensas lluvias causaron deslaves de barro, caídas de árboles e inundaciones en diversas carreteras, lo que llevó a la intervención inmediata de las Brigadas de Carreteras. Utilizando tanto medios mecánicos como manuales, estos equipos han estado trabajando arduamente para restaurar las comunicaciones y garantizar la movilidad, especialmente en localidades con menor población que dependen de estas vías.
A día de hoy, 4 de noviembre a las 09:03 horas, solo dos carreteras continúan cerradas. La primera es la CA-6101 en Bornos, que se espera abrir a lo largo del día, y la segunda, la CA-9101, que conecta Olvera con Coripe. Esta última requerirá unos días más para su reparación, dado que los daños en el firme son significativos y necesitan atención especializada.
La labor realizada es un claro reflejo del compromiso de la Diputación de Cádiz con la seguridad y el bienestar de sus ciudadanos, asegurando que las redes de transporte sean seguras y accesibles para todos. Con el restablecimiento del tráfico en la mayoría de las carreteras, se espera que la normalidad regrese a la circulación en la provincia, facilitando el flujo vital de personas y mercancías.
Fuente: Diputación de Cádiz.
