La Federación de Cooperativas y de la Economía Social de Madrid (FECOMA) ha focalizado su atención en la innovadora labor de «Otro Tiempo, Otro Planeta», una empresa dedicada a la inclusión laboral de mujeres en situación de vulnerabilidad y a la gestión sostenible de residuos en la Comunidad de Madrid. Este proyecto, impulsado por la asociación sin ánimo de lucro Otro Tiempo, combina la economía social con un firme compromiso ambiental, creando oportunidades laborales y fomentando una notable transformación social.
Desde su creación en 2013, esta empresa se ha especializado en la recolección y gestión de residuos no peligrosos, como aceite de cocina usado, cápsulas de café y tapones de plástico. Hasta ahora, han establecido alrededor de 500 puntos de recolección en diversos espacios, como hospitales y centros educativos, fomentando la economía circular y el desarrollo sostenible mediante la conversión de residuos en biocombustibles, compost y materiales reciclables.
Charo González, arquitecta y gerente de la empresa, reorientó su carrera tras la crisis económica del sector inmobiliario para impulsar este proyecto. Destaca que «nació como una alternativa profesional, pero sobre todo como una herramienta para generar empleo digno para mujeres con especiales dificultades de inserción». Desde su consolidación como empresa de inserción en 2019, aseguran que al menos el 50% de su plantilla está compuesto por mujeres en procesos de inserción socio laboral.
Durante un período de hasta tres años, estas mujeres reciben asistencia técnica individualizada, formación profesional y apoyo para superar barreras personales y sociales. González subraya que se enfrentan a dificultades como la edad, un factor que tiende a excluir sistemáticamente a mujeres mayores de cuarenta años del mercado laboral, a pesar de sus cualidades.
Actualmente, «Otro Tiempo, Otro Planeta» cuenta con un equipo de diez mujeres trabajando desde el Polígono Industrial de Los Olivos en Getafe. Desde su inicio, más de 45 mujeres han pasado por el programa, muchas de las cuales han logrado incrementar su autoestima y recuperar su autonomía al acceder a empleos convencionales. «Es especialmente gratificante ver cómo se empoderan y recuperan el control de sus vidas», señala González.
La selección de candidatas se lleva a cabo a través de entidades sociales y organismos públicos, como la Agencia para el Empleo del Ayuntamiento de Madrid y Cruz Roja, su principal colaborador.
Buscando fortalecer su viabilidad económica y su capacidad de generar empleo inclusivo, la empresa explora nuevas líneas de recolección y tratamiento de residuos, como cáscaras de naranja y colchones usados. Desde FECOMA se reafirma el compromiso con iniciativas de economía social que centran su atención en las personas, promoviendo un modelo económico más justo, sostenible e igualitario.