El salmorrejo, un plato de origen tradicional, se remonta a una antigua técnica de conservación de carnes con sal y aceite en Castilla La Vieja y Aragón. Originalmente preparado para trabajadores del campo, consistía en longaniza, lomo y huevos, acompañado de espárragos para enriquecer la contundencia del plato. En la actualidad, se suele optar por hacer el lomo a la plancha para una digestión más ligera, aunque el método tradicional preserva su encanto. La receta incluye freír la longaniza, usando su grasa para cocinar el lomo y los huevos escalfados, realzados por una salsa de ajo, perejil y harina.
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