Desde el estallido de la guerra en Siria en 2011, más de seis millones de sirios se vieron forzados a huir del país debido al régimen de Bashar Asad y al conflicto fratricida. Recientemente, la situación ha dado un giro inesperado, con Asad y su familia buscando asilo en Rusia tras el colapso de su régimen. Esta transición ha motivado a más de tres millones de refugiados en Turquía a contemplar el regreso a Siria, aun enfrentando infraestructuras devastadas y una economía en ruinas. A pesar de la esperanza, la incertidumbre persiste, con varios países europeos reconsiderando la concesión de asilo, mientras otros como España mantienen su postura de protección. Entretanto, algunos refugiados como Haytham, ahora establecidos en Europa, expresan su deseo de quedarse, inseguros del futuro de su país natal.
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