El volcán Krashenínnikov en la península de Kamchatka, Rusia, ha entrado en erupción por primera vez en 600 años, lanzando una columna de cenizas de 6 kilómetros de altura. Las autoridades rusas informaron que la ceniza se extiende hacia el sureste, lo que podría amenazar a los turistas en el Valle de los Géiseres. Esta actividad volcánica coincide con recientes terremotos, incluido uno de magnitud 8,8, que provocaron alertas de tsunami en la región. Además, el volcán Kliuchevskói, el más alto de Eurasia, también ha entrado en erupción. Kamchatka alberga cerca de 130 volcanes, de los cuales unos 30 están activos.
Leer noticia completa de Internacional en El Independiente.