El pasado lunes, un trayecto ferroviario entre Huelva y Sevilla se convirtió en una odisea para 68 pasajeros, quienes quedaron varados en un tren sin luz ni agua durante más de seis horas. La desesperante situación llevó a los pasajeros a solicitar ayuda de la Guardia Civil para su evacuación, según relató María Bernal, una de las afectadas, en el programa «Vamos a ver». Los intentos iniciales de solucionar la avería fueron infructuosos, y aunque el personal de seguridad de la estación intentó asistir, no logró cambiar la desafortunada situación. La inacción y la falta de información agudizaron la tensión entre los pasajeros, que finalmente optaron por exigir descender del tren pese a las advertencias sobre condiciones peligrosas por el clima. Bernal subrayó que el problema no recayó sobre el maquinista ni el personal de a bordo, sino en la falta de un plan de evacuación por parte de Renfe, una situación que cada vez es más frecuente según su testimonio.
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