Las elecciones presidenciales de Estados Unidos en 2024 presentan un empate técnico entre Donald Trump y Kamala Harris, con Trump ligeramente por delante en los estados clave del Colegio Electoral. A nivel nacional, Trump lidera con un 48.4% de intención de voto frente al 48.1% de Harris, una diferencia dentro del margen de error. La contienda se centra en estados péndulo como Pensilvania, Georgia y Nevada, cuyo resultado podría determinar quién obtendrá los 270 votos necesarios para ganar la presidencia. El proceso de votación incluye retrasos, especialmente en estados con alto volumen de votos por correo, y se anticipa que los resultados completos podrían no estar disponibles inmediatamente. La situación tensa y las acusaciones de desinformación subrayan la incertidumbre en estas elecciones históricamente ajustadas.
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