La mariposa monarca, un símbolo cultural en Michoacán, México, enfrenta desafíos que afectan su migración anual, afectando también tradiciones como el Día de Muertos en la comunidad mazahua de Crescencio Morales. Esta mariposa, representativa de las almas de los Santos Difuntos, llega cada año desde Norteamérica, pero el cambio climático y la deforestación han reducido su población y retrasado su arribo. Esto refleja no solo el impacto ambiental, sino también la amenaza a las prácticas culturales ancestrales.
Leer noticia completa en El Pais.