En un esfuerzo pionero hacia la digitalización de la industria molinera, el Proyecto Norman ha introducido un modelo de inteligencia artificial (IA) destinado a revolucionar el proceso de molienda, optimizando el rendimiento de la harina y elevando el estándar de eficiencia en el sector. Esta colaboración entre el Clúster Digital y el Clúster Foodservice surge con la financiación del Ministerio de Industria y Turismo, y busca no solo mejorar la eficiencia y sostenibilidad, sino también la trazabilidad en la producción de harina.
Desde su implementación a finales de julio en Farinera Coromina, el modelo ha operado bajo condiciones industriales reales, manejando dos líneas de molturación. La tecnología empleada ha demostrado una notable eficiencia en la transformación del trigo, incrementando tanto la calidad como la estabilidad del producto final. Además, las operaciones optimizadas han llevado a una apreciable eficiencia energética.
Una de las innovaciones más relevantes del Proyecto Norman es su sistema predictivo, capaz de ajustar automáticamente las condiciones de los molinos acorde a las propiedades específicas del trigo. Este procedimiento no solo maximiza el rendimiento —con un 75% alcanzado en harina y 25% en subproductos— sino que también minimiza las pérdidas durante la molienda. Gracias a la implementación de sensores en tiempo real y técnicas avanzadas de machine learning, el sistema proporciona recomendaciones de ajuste al momento, detectando y corrigiendo cualquier anomalía.
Lluís Coromina, director de Farinera Coromina, destaca que la tecnología ha reducido el tiempo de ajuste de los molinos de 60 a 25 minutos, permitiendo un ahorro anual de 15.000 euros. Asimismo, el programa ha reducido el proceso de capacitación de molineros de dos a tres años a solo uno, demostrando un impacto significativo en la formación laboral y operativa.
Más allá de sus beneficios industriales, el Proyecto Norman enfatiza su compromiso con el medio ambiente, logrando una disminución notable en el desperdicio de trigo y una mejor estabilidad en el proceso de producción, lo que ha beneficiado tanto los costos como las prácticas operativas. Estas mejoras son transferibles a otras operaciones industriales, sugiriendo un modelo escalable para el futuro.
Con una nueva fase de desarrollo a la vista, el proyecto planea ampliar las capacidades del sistema mediante el entrenamiento del algoritmo con datos adicionales y la integración de un control directo sobre los ajustes del molino. Esta evolución promete aún mayor precisión y eficacia en las operaciones molineras.
Las entidades involucradas son líderes en sus respectivos campos: DRIBIA ha liderado el desarrollo del modelo de IA, AETECH ha supervisado su integración tecnológica, y Grupa 1897 junto con Foodservice Cluster han gestionado su comunicación y difusión. Esta colaboración intersectorial refuerza la competitividad y sostenibilidad del sector alimentario, promoviendo un enfoque innovador hacia la transformación digital industrial.
El Clúster Foodservice, comprometido con la cooperación en la cadena de valor alimentaria en Cataluña, ha sido instrumental en esta iniciativa, abogando por la innovación, digitalización y sostenibilidad. Con más de 120 empresas afiliadas, el clúster se consolida como un pilar esencial en la evolución económica de la región, aportando significativamente al Producto Interno Bruto de Cataluña.
