En los últimos años, medicamentos como la semaglutida y la tirzepatida han cambiado el enfoque del tratamiento de la obesidad, pero enfrentan limitaciones en algunos pacientes. La ecnoglutida, una molécula experimental, podría ser un avance significativo en este campo. Como agonista del receptor GLP-1, actúa reduciendo el apetito y mejorando el metabolismo de la glucosa. Los ensayos clínicos sugieren que ofrece una mayor reducción de peso, especialmente en quienes no responden a otros tratamientos, y tiene una vida media más prolongada, permitiendo una administración mensual. Aunque sus efectos secundarios gastrointestinales parecen menos severos, aún se requieren más evidencias. Actualmente en fases II y III de ensayos clínicos, se espera que sus resultados definitivos se conozcan en 2025, con una potencial aprobación en 2026. Es prometedora para personas con obesidad resistente a tratamientos actuales y aquellos que prefieren una dosificación menos frecuente.
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