Banco Sabadell ha adoptado una postura firme frente a la Oferta Pública de Adquisición (OPA) hostil lanzada por BBVA, revelando un plan estratégico para los años 2025-2027 con el objetivo de asegurar su independencia y promover su crecimiento sin recurrir a fusiones. En lo que se percibe como una respuesta directa a su potencial adquisición, el banco catalán ha presentado un plan que enfatiza la rentabilidad, la eficiencia operativa y un fuerte compromiso con los dividendos. Como parte de esta estrategia, se ha prometido repartir 3.400 millones de euros entre sus accionistas durante 2024 y 2025.
Este enfoque estratégico no solo tiene como fin persuadir a los accionistas ofreciéndoles una opción robusta frente a la OPA de BBVA, sino que también es un movimiento calculado para coincidir con el inicio del periodo de aceptación de dicha oferta. La propuesta busca enfatizar el potencial de Banco Sabadell para crecer y mantenerse estable como entidad independiente.
El presidente de Banco Sabadell, Josep Oliu, ha criticado duramente la OPA de BBVA, calificándola de poco beneficiosa para los accionistas, los clientes y el ecosistema económico español en general. Oliu ha subrayado la importancia de mantener la diversidad financiera territorial y ha sugerido que una fusión podría desestabilizar el equilibrio actual.
La propuesta de BBVA ha provocado polémica, generando debate no solo en el ámbito financiero, sino también en el político y social. Existen argumentos que apuntan a un posible fortalecimiento del centralismo en Madrid, en detrimento de la economía catalana. Sin embargo, BBVA defiende la operación como una oportunidad para la consolidación y el crecimiento de ambas entidades.
La decisión final sobre el destino de esta operación está ahora en manos del Gobierno, tras la aprobación condicionada de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) y la apertura de una consulta pública por parte del Ministerio de Economía para evaluar el impacto en la competencia y el interés general. En este contexto crucial, Banco Sabadell se esfuerza por demostrar su capacidad de continuar con un proyecto independiente y sostenible, fuera del alcance de la influencia de BBVA.