El reciente fallecimiento de Antonio Fernández Díaz, conocido como ‘Fosforito’, ha dejado una profunda huella en la comunidad cultural y flamenca de España. Este icónico cantaor, que había hecho de Málaga su hogar adoptivo, fue recordado por su gran aportación al mundo del flamenco y su compromiso con la cultura.
El presidente de la Diputación de Córdoba, Salvador Fuentes, se trasladó a Málaga para rendir homenaje a ‘Fosforito’. En su visita a la capilla ardiente, el presidente tuvo la oportunidad de firmar el Libro de Condolencias, donde expresaron su pesar él y toda la Corporación provincial por la pérdida de una figura tan emblemática. Fuentes destacó que ‘Fosforito’ era un orgullo no solo para Córdoba, sino para toda Andalucía, resaltando su profunda conexión con la Diputación y su legado cultural.
El canto y la pasión de ‘Fosforito’ trascienden su arte; su conexión emocional con el flamenco y su dedicación a resaltar su importancia cultural ejemplifican su grandeza. Salvador Fuentes lo describió como “un gran maestro” que siempre se entregó plenamente a su vocación, llevando el flamenco a todos los rincones del mundo y subrayando los beneficios espirituales que este arte proporciona.
Además de su brillante carrera, Fuentes recordó la humanidad de Antonio Fernández Díaz, describiéndolo como una persona generosa y humilde que siempre buscó apoyar a los nuevos talentos en el ámbito del flamenco. Su legado perdurará en la memoria colectiva de quienes lo conocieron y admiraron. La partida de ‘Fosforito’ no solo marca el final de una era en el flamenco, sino que también deja un vacío en la comunidad, que lo recordará por siempre.
Fuente: Diputación de Córdoba.







