Sidenor, el grupo industrial vasco, ha iniciado los pasos necesarios para adquirir el fabricante de trenes Talgo con la intención de fortalecer y estabilizar la compañía. La adquisición, considerada estratégica, contará con el respaldo del Gobierno central, a través de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), y del Gobierno vasco mediante el fondo Finkatuz. Esta acción se produce tras el veto del Consejo de Ministros a la opa del grupo húngaro Magyar Vagon, debido a sus conexiones con Rusia, y la descartada fusión con la checa Skoda, lo que deja a Sidenor en una posición favorable para liderar la reestructuración de Talgo.
El grupo siderúrgico busca con esta maniobra aumentar la capacidad productiva de Talgo y gestionar la acumulación de pedidos que tiene la empresa. Carlos Cuerpo, ministro de Economía, ha destacado la relevancia de que Sidenor asuma el liderazgo para asegurar la estabilidad a largo plazo de Talgo. El Gobierno vasco, por su parte, ha condicionado su apoyo a garantizar el arraigo industrial en Euskadi y la mejora del empleo.
Sidenor ya ha manifestado oficialmente su interés a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) para lanzar una oferta pública de adquisición por Talgo. Si la operación implica más del 30% del capital, la legislación obliga a presentar una oferta por el 100%, lo que podría resultar en Sidenor tomando el control completo de la empresa. A través de esta operación, se espera no solo reestructurar el accionariado de Talgo sino también incrementar su capacidad productiva para atender la creciente demanda del mercado ferroviario, garantizando su posición como referente en la industria.
