Silvio Rodríguez, tras cinco años de ausencia, regresó a La Habana con un concierto en la escalinata de la Universidad, motivado por el respaldo estudiantil ante recientes protestas. Miles de personas, incluyendo estudiantes, familias y seguidores extranjeros, se congregaron para escuchar al legendario trovador. En su repertorio, Rodríguez incluyó canciones emblemáticas y recientes, y compartió reflexiones sobre la realidad cubana, en un momento de crisis económica y social. Entre el público, que abarcaba al presidente Miguel Díaz-Canel, resonaban sus versos y las palabras de Martí, como un faro de esperanza en medio de la incertidumbre.
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