La reciente escalada en la nota de corte para acceder a la Bolsa del Servicio Andaluz de Salud (SAS) ha generado una gran preocupación entre los profesionales del sector. Esta medida, que muchos consideran desproporcionada, está impidiendo que miles de trabajadores cualificados puedan acceder al empleo público, un ámbito que tradicionalmente ha ofrecido estabilidad y seguridad laboral.
Los sindicatos han alzado la voz en defensa de los derechos de estos profesionales, denunciando una serie de problemáticas que van más allá de la alta nota de corte. La precariedad laboral es uno de los principales puntos de conflicto; muchos trabajadores se ven obligados a aceptar contratos temporales y inestables que no garantizan sus derechos ni ofrecen un futuro prometedor.
Además, los representantes sindicales alertan sobre la existencia de “contratos basura”, que no solo desincentivan la labor de los profesionales, sino que también perjudican la calidad del servicio ofrecido a la ciudadanía. Esta situación se ve agravada por la falta de transparencia en el sistema de contratación, que genera suspicacias y desconfianza entre los aspirantes y los que ya forman parte del sistema.
Otro tema crítico es la discriminación en el acceso a los puestos de trabajo. Las quejas respecto a criterios arbitrarios en la selección y contratación son comunes, lo que ha llevado a muchos a cuestionar la equidad del proceso. Los sindicatos exigen una revisión exhaustiva de estas prácticas, abogando por un sistema más justo y accesible que garantice la igualdad de oportunidades para todos los profesionales.
La suma de estos factores ha creado un ambiente de incertidumbre y descontento en el sector sanitario, que ya de por sí atraviesa momentos difíciles. Los sindicatos continúan presionando para que se tomen medidas que pongan fin a esta situación y devuelvan la dignidad a los profesionales de la salud, asegurando que el acceso al empleo público no sea un privilegio reservado para unos pocos.
Fuente: CCOO Andalucía.