Templus, la plataforma de centros de datos respaldada por Intermediate Capital Group (ICG) y Teras Capital, ha decidido dejar de lado su límite de inversión inicial de 300 millones de euros para enfocarse en una ambiciosa expansión por el sur de Europa. Este movimiento estratégico busca fortalecer su presencia, principalmente en España, y ampliar su alcance hacia Portugal, Italia y Francia.
El consejero delegado de Templus, Nacho Velilla, confirmó que la empresa continuará ampliando su red de centros de datos, aprovechando el escenario favorable que ofrece actualmente el sector digital en España. «El techo de inversión se ha eliminado», mencionó Velilla, subrayando la intención de la compañía de seguir creciendo de manera estratégica.
En Barcelona, Templus ha inaugurado un nuevo centro de datos, adquirido a Cellnex, que cuenta con 3.000 metros cuadrados y una capacidad de 1,7 MW. La ampliación planificada permitirá superar los 3 MW en el próximo año. Con seis centros activos en ciudades clave como Málaga y Madrid, la compañía aspira a cerrar el año con 20 instalaciones, al tiempo que explora oportunidades en otras regiones españolas.
El plan de expansión para Cataluña es especialmente ambicioso, aprovechando su ubicación estratégica como nodo de interconexión digital y su proximidad a la estación de amarre de cables submarinos, BCLS. Esta conectividad refuerza el papel de Barcelona como un importante hub digital en el sur europeo.
La sostenibilidad y la eficiencia son pilares fundamentales para Templus. El centro barcelonés destaca por su bajo PUE de 1,14 y su capacidad para integrar tecnologías avanzadas, como la refrigeración líquida, adaptándose a las exigencias de la inteligencia artificial.
Mirando hacia el futuro, Templus planea incursiones en Portugal, Italia y Francia, manteniendo su enfoque en proyectos escalables y de alto rendimiento. Este crecimiento se alinea con un contexto europeo en plena ebullición, donde se prevé que la inversión en centros de datos experimentará un crecimiento significativo en la próxima década.
La expansión de Templus refleja la importancia crítica de los centros de datos en la economía digital actual, consolidándose como infraestructuras esenciales para la resiliencia tecnológica y económica de Europa.