El Parlamento Europeo ha aprobado la evaluación de Teresa Ribera para ocupar un cargo en el nuevo Ejecutivo de Ursula von der Leyen, aunque sin el apoyo del Partido Popular español, que la acusa de negligencia en la gestión de la crisis de la DANA y exige su dimisión si es imputada. A pesar de las divisiones, el acuerdo entre populares, socialistas y liberales permitirá que el nuevo Colegio de Comisarios se vote en conjunto la próxima semana. La decisión ha generado tensiones internas en el PP, ya que la delegación española mantiene una postura crítica frente a la inclusión de Ribera, en contraposición a sus colegas europeos. En un contexto de negociaciones políticas, el PP español critica al PSOE por aceptar candidatos de extrema derecha para conservar el respaldo a Ribera, subrayando la supuesta inconsistencia del presidente Pedro Sánchez en sus alianzas políticas.
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