En Washington, la resistencia contra las nuevas políticas del presidente Donald Trump se intensifica mientras sindicatos, ONG, fiscales y funcionarios desafían sus órdenes ejecutivas, que muchos consideran inconstitucionales. Aunque las manifestaciones callejeras no han alcanzado el impacto del pasado, el sistema judicial ha bloqueado varias de sus medidas más polémicas, como el fin de la ciudadanía por nacimiento y el traslado de presas transgénero. Trump, por su parte, intenta maniobrar alrededor de estos bloqueos con una estrategia de inundar la zona mediática, promoviendo iniciativas más discutibles y generando distracción con otras menos trascendentales. En paralelo, surgen protestas nacionales e internacionales, y un férreo debate político se desarrolla entre sus seguidores y detractores, cuestionando la autoridad judicial frente a las decisiones presidenciales. Elon Musk, nombrado por Trump para liderar recortes gubernamentales, también se ve envuelto en la controversia, mientras que importantes bufetes de abogados se unen a la contienda legal como representantes de la oposición.
Leer noticia completa de Internacional en El Independiente.