La Universidad de California, Los Ángeles (UCLA) ha abierto un nuevo capítulo en la historia del teatro contemporáneo con una puesta en escena del musical «Xanadu» que ha sido tan innovadora como la institución misma. Reconocida por ser el hogar de 16 laureados con el Premio Nobel y por su clasificación como la mejor universidad pública de Estados Unidos durante ocho años consecutivos, UCLA ha demostrado una vez más su liderazgo al integrar la tecnología de vanguardia en las artes escénicas. Esta producción no solo ha enriquecido el espectáculo, sino que ha redefinido la experiencia teatral para el público del siglo XXI.
La ambiciosa colaboración entre el Centro de Investigación y Ingeniería en Medios y Performance (REMAP) de UCLA y la Oficina de Computación de Investigación Avanzada (OARC) ha hecho posible esta experiencia inmersiva sin precedentes. Mediante el uso de microservicios de inteligencia artificial, desarrollados en la nube, los espectadores tuvieron la oportunidad de interactuar con la escenografía del musical, haciendo de cada función un evento verdaderamente único.
Durante las presentaciones, que se realizaron entre el 15 y el 23 de mayo de 2025, el público participó de manera activa en la creación de medios utilizando sus teléfonos móviles. A través de gestos en sus dispositivos, los asistentes podían generar dibujos que eran procesados instantáneamente por los servicios de IA para ser proyectados en grandes pantallas LED, conocidas como «santuarios». Estas imágenes, tanto en 2D como en 3D, se integraban en tiempo real a la escenografía digital, transformando el escenario con cada nueva representación.
El secreto detrás de esta sincronización perfecta radica en la sofisticada infraestructura tecnológica empleada. Con Amazon SageMaker al mando del procesamiento de inteligencia artificial y una arquitectura sin servidor, el sistema fue capaz de responder en menos de dos minutos desde que se creaba un dibujo hasta su proyección en el escenario. Este diseño eficiente garantizó que hasta 500 miembros del público pudieran interactuar simultáneamente, sin sacrificar la calidad ni la fluidez del espectáculo.
Más allá de las innovaciones visuales, la producción también destacó por su enfoque en la colaboración orquestal. Un diseño modular y centrado en eventos permitió integrar nuevas características y realizar ajustes al instante, garantizando que cada representación mantuviera su nivel de interacción y sorpresa. Los desarrolladores gestionaron exitosamente más de 80 usuarios móviles a la vez, garantizando que todos los asistentes pudieran participar plenamente en la experiencia.
Este proyecto ha supuesto una invaluable plataforma de aprendizaje para sus desarrolladores, quienes han explorado nuevas formas de gestionar recursos y optimizar costos. Desde la automatización de procesos hasta el manejo eficiente de picos de demanda, cada aspecto de la producción ha servido como un laboratorio de innovación donde tecnología y arte se entrelazan.
De cara al futuro, los responsables de la obra están explorando mejoras para futuras producciones, con un enfoque especial en la optimización y escalabilidad del sistema. Este enfoque proactivo asegura que UCLA continúe siendo un líder pionero en la intersección de la tecnología y las artes, demostrando cómo la inteligencia artificial puede revolucionar el teatro moderno y enriquecer la experiencia para todos los participantes.








