La relatora de la ONU para Palestina, Francesca Albanese, acusa a Estados Unidos de intentar amedrentarla con tácticas similares a las de la mafia tras imponerle sanciones en respuesta a su reciente informe sobre Gaza. Albanese afirma mantener su postura firme respecto al «genocidio en curso» y exige la intervención del Tribunal Penal Internacional (TPI). En su informe, señala a empresas tecnológicas estadounidenses por beneficiarse del conflicto. El secretario de Estado estadounidense, Marco Rubio, criticó sus comentarios por considerarlos antisemitas y proterroristas. La ONU y Amnistía Internacional han calificado las sanciones como un peligroso precedente, y una petición en Italia ha recabado rápidamente apoyo en favor de Albanese. A pesar de las sanciones, la relatora se siente psicológicamente inafectada y subraya la grave crisis humanitaria en Gaza, destacando la muerte de miles de personas, incluidos niños.
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