En su intervención, se abordó la reciente situación de emergencia vivida en España a causa de la Depresión Aislada en Niveles Altos (DANA), subrayando la responsabilidad que recae en las instituciones para gestionar adecuadamente este tipo de fenómenos adversos. Sin mencionar nombres específicos ni hacer referencia directa a los gobiernos nacional o autonómico, el mensaje dejó entrever la importancia de una actuación coordinada y eficiente por parte de los organismos responsables para minimizar el impacto en las zonas afectadas. La alusión implícita a los responsables políticos se percibió claramente en el contexto del discurso.
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