Expertos en seguridad alimentaria han lanzado una sombría advertencia sobre la creciente amenaza de hambruna en el norte de la Franja de Gaza. En un comunicado reciente del Comité de Revisión de la Hambruna (FRC) de la Clasificación Integrada de Fases, se destacó la urgente necesidad de atención debido a la rápida deterioración de la situación humanitaria en el área. La catástrofe es inminente y se necesita una acción expedita de parte de todos los actores involucrados para evitar un desastre humanitario.
Cindy McCain, directora del Programa Mundial de Alimentos (PMA), enfatizó que las condiciones actuales son insostenibles, instando a medidas inmediatas para garantizar el paso seguro y rápido de suministros humanitarios y comerciales. Las restricciones actuales han resultado en una «drástica reducción» en el número de camiones que ingresan a Gaza, pasando de cerca de 200 diarios en el verano a solo 58 a finales de octubre, mayormente con ayuda humanitaria.
Jean-Martin Bauer, director de Análisis de Seguridad Alimentaria y Nutrición del PMA, señaló que la situación crítica es consecuencia de diversos factores: desplazamientos masivos de población, disminución en la entrada de bienes y la destrucción de infraestructura clave. A esto se suma un alarmante incremento en el precio de los alimentos, que han duplicado su costo en las últimas semanas, alcanzando niveles hasta diez veces superiores a los previos al conflicto.
Frente a esta situación, el FRC ha hecho un llamamiento urgente a todas las partes con influencia potencial para actuar de inmediato y evitar el agravamiento de la crisis. Es vital permitir el ingreso de alimentos, agua, suministros médicos y otros recursos esenciales en Gaza. También se exige el cese del asedio israelí en las zonas del norte y la protección de instalaciones sanitarias y civiles de futuros ataques.
La falta de acción inmediata podría significar un incremento en el sufrimiento de la población civil, con más pérdidas de vidas evitables. Las estimaciones indican que, sin una respuesta contundente, la magnitud de la tragedia superaría cualquier cosa vista en Gaza desde el inicio del reciente conflicto en octubre de 2023.
