La Asamblea Nacional de Venezuela, dominada por el chavismo, ha solicitado nuevamente al presidente Nicolás Maduro romper lazos diplomáticos y comerciales con España, reflejando el creciente deterioro de las relaciones tras las disputadas elecciones presidenciales del 28 de julio. La controversia interna e internacional, que incluye dudas expresadas por la ONU y el jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell, sobre la legitimidad de la victoria de Maduro, subraya la crisis. En medio de acusaciones de refugio a figuras opositoras como Leopoldo López y Edmundo González por parte de España, el discurso beligerante del presidente de la Asamblea, Jorge Rodríguez, sugiere un enfrentamiento simbólico, incluido un llamamiento paródico a abolir la monarquía española. No obstante, analistas ven improbable una ruptura definitiva debido a los estrechos vínculos culturales y migratorios entre ambos países, aunque indican que el Gobierno venezolano podría endurecer su postura si persisten los cuestionamientos.
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