En medio de un escenario digital en constante evolución, Western Digital (WD) reafirma la relevancia del disco duro (HDD) en el almacenamiento masivo, particularmente en el contexto de la inteligencia artificial (IA). Irving Tan, consejero delegado de WD, argumentó en una reciente conferencia en Tokio que, contrario a la creencia popular de que el HDD está obsoleto, sigue siendo crucial en los centros de datos.
Tan destacó cifras clave que refuerzan esta postura: actuales discos de 32 TB que se prevé evolucionen a 36 TB para 2026 gracias a la tecnología ePMR y a 44 TB en 2027 con HAMR. Estos desarrollos responden al crecimiento exponencial de datos generado por la IA, que se estima triplicará el volumen global para 2030.
En los centros de datos hiperescalares, aproximadamente el 80% de los datos se almacena en HDD, fundamentado en la economía del dato que privilegia el coste por terabyte, la fiabilidad y el consumo energético. Mientras los SSD son indispensables para el acceso rápido a información «caliente», el HDD se posiciona como la mejor opción para datos «templados» y «fríos», y la cinta conserva su función en la custodia a largo plazo.
WD está ajustando sus procesos para marcar un cambio en el desarrollo de tecnología HDD, avanzando de métodos secuenciales a paralelos, lo que permitirá escalar la producción masiva con rapidez y eficiencia. Este enfoque es crucial para soportar la demanda mientras se asegura una fiabilidad comparable a las tecnologías existentes.
Japón surge como un aliado estratégico para WD, con inversiones significativas en investigación y desarrollo. El país no solo es un pilar en la producción, sino también en innovación, con colaboraciones que buscan avanzar en tecnologías de cabezales de lectura.
La persistencia del HDD en el mercado de hiperescala se debe a su capacidad masiva, fiabilidad y eficiencia energética. A medida que la IA redefine las necesidades de almacenamiento, el HDD continúa siendo una pieza fundamental, respaldando las estrategias de almacenamiento por niveles que optimizan el uso de recursos en función del valor y acceso del dato.
Este enfoque integrado resalta que ni el SSD ni el HDD dominan de manera absoluta; en cambio, coexisten complementándose mutuamente en un ecosistema tecnológico diverso y creciente.