Una reciente encuesta revela que el 40% de las personas con diabetes han cancelado citas médicas por temor al juicio de su entorno. Este estudio, realizado por Abbott junto con la Federación Española de Diabetes (FEDE), destaca cómo los comentarios cotidianos pueden influir negativamente en quienes padecen esta enfermedad.
Frases como «Me va a dar diabetes solo de ver eso» o «Creía que los diabéticos no podían comer donuts» son claros ejemplos de cómo puede afectar el estigma asociado a esta condición. En España, más de 5 millones de personas conviven con diabetes, enfrentando no solo retos médicos, sino también prejuicios sociales que complican su bienestar general.
Antonio Lavado, presidente de FEDE, ha subrayado la importancia de reconocer los prejuicios que enfrentan a diario los diabéticos. «Es vital fomentar una comunicación empática para mejorar la calidad de vida de quienes convivimos con esta condición», aseguró.
El estigma es un problema significativo, con casi el 70% de los encuestados sintiéndose estigmatizados y un 85% encontrando información errónea sobre la diabetes en medios de comunicación y redes sociales. Además, el 40% menciona que su enfermedad se toma a menudo como objeto de burla, y casi el 25% evita compartir su diagnóstico debido a la vergüenza.
Este estigma no sólo afecta emocionalmente, sino que también tiene repercusiones en la salud física. Un 40% ha evitado recibir atención médica por temor al juicio. Pruebas biométricas muestran que el 39% de los encuestados experimenta un alto nivel de estrés ante comentarios estigmatizantes, comparable al estrés previo a una entrevista de trabajo.
Para combatir estos estigmas, los días 19 y 20 de octubre, la Plaza de Callao en Madrid acogerá un circuito experiencial e interactivo. Esta iniciativa busca educar al público sobre los prejuicios asociados a la diabetes y sus consecuencias para la salud.
José Luis Portero, director médico de Abbott Diabetes Care, enfatiza el compromiso de la compañía en apoyar a la comunidad. «Queremos empoderar a quienes viven con diabetes para que accedan sin temor a la atención que necesitan», afirmó. La campaña de Abbott y FEDE sirve como un llamado a la acción para reducir el estigma y mejorar el soporte para quienes viven con esta condición crónica.