ASE Technology Holdings, reconocida como la principal empresa de ensamblaje y prueba de semiconductores a nivel global, ha tomado una decisión estratégica que podría redefinir su futuro en la industria. La compañía ha optado por estandarizar sus operaciones en torno a los procesadores EPYC y Ryzen de AMD, buscando así mejorar su rendimiento y eficiencia energética, al mismo tiempo que fortalece su estrategia en inteligencia artificial y fábricas inteligentes.
Desde su colaboración inicial en 2007 con AMD en tecnologías de empaquetado avanzado como los interposers 2.5D, ASE ha dado un paso importante al integrar hardware de AMD en su propia infraestructura. Jekyll Chen, director de infraestructura IT de ASE, destacó que esta decisión se sustentó en un análisis exhaustivo de factores como rendimiento, estabilidad, y eficiencia energética, percepción que subraya la importancia del coste total de propiedad y la capacidad para manejar cargas de trabajo de inteligencia artificial.
La introducción de procesadores EPYC y Ryzen en las operaciones de ASE no solo ha incrementado el rendimiento de sus sistemas en un 50%, sino que también ha reducido el consumo energético en un 6,5%. Estos avances suponen un ahorro del 30% en el coste total de propiedad respecto a soluciones anteriores, permitiendo a ASE optimizar tareas complejas y escalar operaciones conforme aumentan las necesidades de inteligencia artificial y análisis en tiempo real.
En su enfoque hacia el futuro, ASE también está evaluando las GPUs AMD Instinct MI300 Series, diseñadas para acelerar las cargas de trabajo de IA en los centros de datos. Este enfoque reafirma su intención de liderar en el campo del empaquetado heterogéneo y la integración de componentes, considerándose la computación de alto rendimiento como una necesidad operativa.
El compromiso de ASE con AMD no solo se circunscribe al ámbito tecnológico, sino que también está alineado con sus objetivos de sostenibilidad y políticas de ESG. La elección de AMD respalda su estrategia para reducir el consumo de energía y optimizar el uso de recursos, reforzando así su enfoque en sostenibilidad.
A medida que se tornan más marginales los beneficios de los nodos litográficos avanzados, ASE ve en la combinación de procesadores de alto rendimiento y soluciones de empaquetado inteligente la clave para mantenerse competitivo. La decisión de apostar por AMD no solo representa un avance hacia la eficiencia y escalabilidad, sino que también posiciona a la compañía en un lugar privilegiado para enfrentar los desafíos de un futuro dominado por la inteligencia artificial.