Ingenieros del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) han desarrollado un innovador sensor capaz de detectar el SARS-CoV-2 en cuestión de minutos y sin necesidad de anticuerpos. El dispositivo, que emplea nanotubos de carbono, promete un avance significativo en el diagnóstico rápido y eficiente, no solo para la COVID-19, sino también para otras enfermedades epidémicas.
El sensor utiliza nanotubos de carbono, elementos cilíndricos de grosor nanométrico que se tornan fluorescentes al ser expuestos a luz láser. Estos nanotubos, envueltos en diferentes polímeros, pueden identificar moléculas específicas mediante una técnica denominada Reconocimiento Molecular de Corona en Fase (CoPhMoRe). Este método permite la creación de sensores químicos que responden a moléculas determinadas de forma precisa.
Liderada por el profesor Michael Strano, la investigación revela que este enfoque elimina la necesidad de utilizar anticuerpos u otros agentes químicos, los cuales requieren más tiempo para generarse y purificarse. En menos de diez días, los ingenieros fueron capaces de identificar y probar una molécula de carbono modificada que detecta proteínas virales del SARS-CoV-2, incorporándola a un prototipo funcional.
El dispositivo proporciona resultados en aproximadamente cinco minutos y es capaz de detectar concentraciones tan bajas como 2,4 picogramos de proteína viral por mililitro de muestra. En experimentos recientes, se ha demostrado que el límite de detección de este sensor es inferior al de las pruebas rápidas disponibles actualmente en el mercado.
Adicionalmente, el sensor ha mostrado su capacidad para detectar la proteína de la nucleocápside del SARS-CoV-2 en la saliva, superando las dificultades que presentan las moléculas pegajosas de carbohidratos y enzimas digestivas que suelen interferir en la detección de proteínas en la saliva.
Sooyeon Cho, otro de los investigadores involucrados, destacó que este nuevo dispositivo presenta un alcance de detección y un tiempo de respuesta superiores, sin depender de un diseño basado en anticuerpos y receptores enzimáticos. La rapidez en la que se puede diseñar y probar el dispositivo es una ventaja notable en comparación con los métodos convencionales, que requieren más tiempo debido a su dependencia de anticuerpos y receptores enzimáticos.
El proyecto de Strano ha recibido financiación de los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos, quienes han apoyado la creación del sensor CoPhMoRe. Actualmente, los investigadores están en proceso de solicitar una patente para empezar a comercializar este dispositivo diagnóstico de la COVID-19.
Este avance señala un enfoque innovador y eficaz para el desarrollo rápido de dispositivos diagnósticos en caso de futuras pandemias, y podría transformar la manera en que se realizan los diagnósticos en tiempo real, tanto en entornos laborales como en los aeropuertos.