La Comisión Europea ha lanzado una advertencia crucial instando a los países de la Unión Europea a intensificar sus esfuerzos en ciberseguridad, subrayando el aumento en sofisticación y frecuencia de los ciberataques que amenazan las infraestructuras críticas. Este llamado surge tras varios incidentes graves, como el ataque al Ministerio de Finanzas francés previo a la cumbre del G-20, y un ciberataque al sistema de derechos de emisión de CO₂ de la UE, entre otros.
La comisaria de Agenda Digital, Neelie Kroes, destacó la necesidad de redes y servicios informáticos seguros para los europeos, señalando que si bien hay progresos, es imperativo hacer más tanto a nivel comunitario como global.
Bruselas ha enfatizado la necesidad de que todos los Estados miembros establezcan Equipos de Respuesta ante Emergencias Informáticas (CERT) antes de 2012 para reducir las vulnerabilidades. Actualmente, países como Irlanda, Portugal y Polonia aún no han creado un CERT, lo que, según Jonathan Todd, portavoz de Kroes, debilita a toda la Unión.
Un informe de la Comisión Europea reconoce avances desde el plan de acción de 2009, pero insiste en que se requieren acciones adicionales para proteger eficazmente las infraestructuras críticas. Entre las medidas futuras, se prevé un plan de contingencia a escala europea para 2026 y simulacros de ciberseguridad regulares.
Además, la Comisión busca fomentar estándares internacionales de seguridad y establecer acuerdos de cooperación con terceros países, como Estados Unidos, para combatir el cibercrimen. La digitalización y la interconexión global han posicionado la ciberseguridad como un asunto de máxima prioridad estratégica y nacional, requiriendo coordinación y acción inmediata de los Estados miembros.