En un contexto donde el tráfico global de internet podría alcanzar los 175 zettabytes para 2025, la ciberseguridad se ha convertido en una cuestión ineludible para organizaciones de todo tipo. Es aquí donde Cloudflare ha surgido como un actor clave, transformando la infraestructura de internet y las prácticas de seguridad desde su creación en 2010. Con su enfoque en democratizar la ciberseguridad, la compañía ofrece tanto servicios gratuitos como de nivel empresarial para pequeñas empresas y organizaciones no lucrativas.
Alissa Starzak, directora jurídica adjunta y jefa global de política pública de Cloudflare, en una reciente entrevista para Cloud Computing News, destacó la misión de la empresa: hacer que la protección en internet esté al alcance de todos. Esta visión se materializó en 2010 cuando Cloudflare lanzó su propuesta revolucionaria de brindar servicios gratuitos de ciberseguridad. Starzak se refirió a la compañía como «disruptores en nuestro sector», destacando estrategias como el Proyecto Galileo, que desde 2014 protege a organizaciones no gubernamentales y civiles, inspirado en la necesidad de salvaguardar la libertad de información tras el ciberataque a un medio ucraniano durante la crisis de Crimea. Según el Informe de Impacto de Cloudflare de 2023, este proyecto ha blindado a más de 2.400 organizaciones en 111 países ante un promedio de 67,7 millones de ataques diarios.
La inteligencia artificial (IA) juega un papel dual en el ámbito de la ciberseguridad. Cloudflare utiliza IA para mejorar la detección de amenazas y la respuesta automatizada, lo cual ha robustecido la seguridad para sus clientes. Aun así, Starzak advierte que la IA también puede ser empleada por actores maliciosos para desarrollar ataques más sofisticados, resaltando la importancia de la vigilancia constante y la innovación en tácticas defensivas.
Otro desafío es equilibrar la moderación de contenidos con la libertad de expresión. Starzak explicó que Cloudflare trabaja para discernir entre distintos tipos de servicios de internet, evitando que las decisiones sobre moderación de contenidos afecten la conectividad o la libertad de expresión.
En cuanto a la protección de los más vulnerables, Starzak urgió a prestar atención a las organizaciones sin fines de lucro y civiles que carecen de recursos para robustecer su ciberseguridad. Reveló que la Agencia de Seguridad de Infraestructura y Ciberseguridad (CISA) en Estados Unidos está desarrollando kits de herramientas para estas organizaciones, en línea con la misión de Cloudflare de ofrecer soluciones accesibles sin importar el tamaño o presupuesto.
Cloudflare se ha propuesto construir un futuro digital más seguro, accesible y equitativo. Su dedicación a través del Proyecto Galileo, el empleo estratégico de la IA y una prudente moderación de contenidos, no solo busca resolver los problemas actuales de ciberseguridad, sino también allanar el camino hacia un futuro digital más protegido. Según Starzak, «ayudar a construir un mejor internet no se trata solo de tecnología, sino de empoderar a las personas, proteger voces vulnerables y asegurar que los beneficios de la era digital estén disponibles para todos». En un mundo donde la seguridad en línea se ha vuelto esencial, Cloudflare demuestra que la ciberseguridad debe ser accesible para todos, sin importar el tamaño o los recursos de la organización.