El Ayuntamiento de Moguer (Huelva) se ha consolidado como un referente en la colaboración institucional para erradicar los asentamientos chabolistas en las provincias de Almería y Huelva, trabajando conjuntamente con la Junta de Andalucía en el marco del Plan Easen. Este primer plan estratégico, instigado por la consejería de Inclusión Social, Juventud, Familias e Igualdad, busca la inclusión social de las personas que residen en estos asentamientos.
La delegada municipal del área de Servicios Sociales y Atención a la Ciudadanía, Lourdes Garrido, ha detallado que la labor del Ayuntamiento de Moguer en este ámbito se remonta a más de una década, implicando acciones tanto políticas como técnicas. Estas acciones se han coordinado de manera multidisciplinaria, abarcando áreas como servicios sociales, medio ambiente, seguridad ciudadana y la Empresa Municipal de Gestión de Suelo y Vivienda (Emvisur).
Desde el inicio de sus esfuerzos en 2014, Moguer ha logrado reducir significativamente el número de asentamientos, pasando de 21 a solo seis, gracias al trabajo de un equipo interdisciplinar financiado por fondos propios y subvenciones de la Junta de Andalucía. Este esfuerzo ha permitido un censo actualizado de asentamientos, facilitando la intervención integral en ámbitos de vivienda, empleo, educación y salud, mejorando así las condiciones de vida de los residentes.
Con la creación del ‘Plan Local de Erradicación de asentamientos chabolistas’, Moguer busca fortalecer esta labor integrando diversas áreas y actores sociales, incluyendo asociaciones locales, sindicatos y profesionales relevantes, para asegurar un enfoque integral y colaborativo.
La firma del Protocolo General de Actuación en 2022, junto al Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030 y el Ayuntamiento de Lepe, ha sido un hito en la suma de esfuerzos para erradicar asentamientos en ambos municipios. Esto ha permitido desarrollar nuevas soluciones habitacionales temporales y apoyos específicos, como la colaboración con la asociación Diappo para el alojamiento de trabajadores temporeros.
Además, se han implementado cursos de capacitación lingüística y actividades que promueven la inclusión cultural y social de los habitantes, además de iniciativas contra el racismo y la xenofobia dirigidas a la población local.
Lourdes Garrido destaca que este camino ha sido lento pero gratificante, subrayando la importancia de la colaboración institucional para lograr los objetivos de erradicación de asentamientos y mejorar las condiciones de vida de todos los involucrados.
Fuente: Junta de Andalucía.