Un grupo de manifestantes indígenas atacó con piedras y palos el convoy del presidente de Ecuador, Daniel Noboa, mientras se dirigía a entregar ayuda humanitaria en la provincia de Cañar. El Gobierno ha calificado el ataque de intento de asesinato y terrorismo, anunciando que los detenidos serán procesados. La Presidencia denunció el intento por parte del grupo de impedir la entrega de obras destinadas a mejorar la vida comunitaria. Según la ministra de Ambiente y Energía, Inés Manzano, el convoy también mostró signos de haber sido alcanzado por balas. Hasta el momento, cinco personas han sido detenidas en relación con el ataque.
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